Mi hijo tiene muchas faltas de ortografía

A partir de 3º de Educación Primaria comienza la exigencia del aprendizaje de la ortografía. En D-Letras sabemos que la escritura es un proceso muy complejo, no es un aprendizaje “natural” como puede ser el del lenguaje oral o el del desarrollo motor. Es un proceso elaborado, costoso, fruto de…

A partir de 3º de Educación Primaria comienza la exigencia del aprendizaje de la ortografía.

En D-Letras sabemos que la escritura es un proceso muy complejo, no es un aprendizaje “natural” como puede ser el del lenguaje oral o el del desarrollo motor. Es un proceso elaborado, costoso, fruto de muchos factores, cognitivos y sociales que exige un aprendizaje formal e intencional.

Para que un niño/a tenga un adecuado desarrollo ortográfico necesita del desarrollo de una serie de habilidades:

  • Habilidades motoras: ligadas al trazo por lo que tienen menos relevancia.
  • Habilidades perceptivas: auditiva, visual y espacio-temporal. Esto permite la copia y el dictado.
  • Habilidades fonológicas
  • Habilidades cognitivas: atención, memoria de trabajo…
  • Habilidades lingüísticas: fonéticas, fonológicas, semántica, morfosintaxis.
  • Habilidades metalingüísiticas: para hacer una adecuada correspondencia fonema grafema
  • Habilidades afectivo-emocionales: motivación.

En general, la escritura es una actividad más compleja que la lectura, en la que intervienen mayor número de procesos cognitivos:

  • Procesos motores
  • Procesos de planificación: Generar información,  selección y organización de la información y tareas de revisión
  • Procesos sintácticos: Organización gramatical
  • Procesos léxicos: Ruta visual, directa o superficial y ruta fonológica-indirecta

Vamos a centrarnos en explicar los procesos léxicos para que el lector pueda entender bien la complejidad de este aprendizaje.

Cuando nos referimos a la ortografía hablamos de tres tipos de ortografía:

La ortografía natural

Hace referencia a la ruta fonológica. Esta ruta es imprescindible para aprender a escribir y está estrechamente relacionada con la ortografía natural. Se basa en la asociación de un sonido con su letra, es decir, asociación Fonema-Grafema (RCFG). Dentro de esta ruta encontraríamos errores de unión de palabras (lacasa), fragmentación (des pués) sustitución (miero-miedo), omisión (cación), adición (cuberir – cubrir) e inversión (pluga – pulga). Estos errores deberían desaparecer entorno a los 8-9 años.

La ruta ortográfica o visual

Cuando leemos una palabra la almacenamos en nuestro “almacén léxico” (visual), la guardamos en nuestra cabeza como si fuese una imagen y a la hora de escribirla no hacemos uso de ninguna regla ortográfica, sabemos que se escribe así porque está almacenada en nuestra cabeza, evocándola como un dibujo. Es decir, el niño solo escribirá correctamente la palabra si ha accedido previamente a su representación visual.

Para ello es imprescindible que la palabra se haya almacenado en nuestra cabeza de forma correcta, siendo indispensable haberla leído previamente. Un ejemplo sería: botella. Los errores más frecuentes serían la sustitución entre grafemas que corresponden a un mismo fonema (b-v; j-g, y-ll, q-k-c…)

Dentro de la ortografía arbitraria encontramos la ortografía de palabras homófonas. Estas son palabras que suenan de igual modo que otra, pero se escriben diferente y tienen diferente significado. Por ejemplo “vaca” y “baca”.

La ortografía reglada

Es considerada subapartado de la ortografía arbitraria. Es el aprendizaje de las reglas ortográficas. Por ejemplo, aprender que todas las palabras que comienzan por “hue” se escriben con “h”.

Dependiendo del tipo de errores que cometa el alumno debemos trabajar de forma u otra.

En el próximo artículo hablaremos sobre diferentes tipos de actividades que podemos hacer para ayudar a nuestros hijos o alumnos, a corregir sus errores ortográficos. Os explicaremos qué actividades deben evitarse y cuáles son las mejores prácticas a poner en marcha como papis o docentes. Ya que hay determinadas prácticas que contribuyen a fijar los errores, en lugar de prevenirlos, y por tanto, debemos evitarlas.

Si crees que tu hijo/a puede tener una dificultad específica de aprendizaje, como es la disortografía , no dudes en consultarnos. Recordar que la disortografía se define como el conjunto de errores de la escritura que afectan a la ortografía, que no afectan al trazado, a la forma ni a la dirección de las letras y palabras escritas. Son niños con dificultad para transcribir las palabras de forma correcta y aplicar las normas ortográficas.

 

Autor:

Cristina Martínez Carrero

Psicopedagoga y Maestra AL

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